Extensas tierras
baldías de propiedad del Estado eran usufructuadas por aquellos llaneros quienes vivían
de la ganadería principalmente. Ellos se adaptaban al comportamento gregario
del ganado vacuno organizado naturalmente en "rodeos" y al
comportamento gregario de equinos organizados naturalmente en
"hatajos" .
Los llaneros también vivían otras adaptaciones con el medio ecológico, para obtener piezas de caza, pesca, maderas y
para sobrevivir en medio de los continuos peligros que el llanero conocía minuciosamente.
Los cultivos de pancoger en sus "conucos" eran muy limitados.
Las viviendas se constituían en el núcleo familiar y geográfico de
los "fundos".
En general, la
mentalidad de las familias llaneras gozaba de rasgos comunes de calidad
humana, solidaridad, respeto a la palabra, dones naturales que les infundía el
mismo medio geográfico que los lectores podrán ver en el siguiente capítulo (tercera parte), sobre la cultura criolla. Aunque la cultura católica era tradicional en su
medio, debido a las distancias enormes, la práctica espiritual de los llaneros
era más una conducta responsable y libre, bien entendida y bien
practicada, que una amonestación frecuente de los predicadores. Los
servicios religiosos eran celebraciones esporádicas, poco frecuentes y
centralizadas en las lejanas urbes. Esta sana mentalidad del llanero criollo dio origen al pueblo de Villanueva. En el caso de la fundación de Villanueva, el anterior cuadro
tradicional de una vida religiosa discreta y eficaz, se vio
alterada por la confrontación entre facciones ideológicas, liberales y conservadoras,
donde estuvo muy comprometida la Iglesia Católica. Este hecho,
reciente todavía para la década de1960, dio como resultado que los promotores de
la fundación del pueblo y otros de los llaneros llegados inicialmente a
poblarlo, se diferenciaran de la mayoria de inmigrantes llegados poco después al pequeño
pueblo, éstos últimos con una carga psíquica de fanatismo religioso.
Segunda y última cedula de ciudadanía de
Campo Elías Forero Forero, padre del narrador Campo Elias, impresa en papel duro por una sola cara
Segunda cédula de ciudadanía de Antonio
Forero Romero, impresa en papel duro por una sola cara
En la cultura llanera se discernía el
Mundo natural frente a otra Realidad Absoluta, Dios o Aquello que sólo
se vivencia como un " re-encuentro" en conexión con la Unidad con el Cosmos, en un estado
de conciencia real, en medio de las extensas sabanas, cielo abierto, esteros,
surales, matas de monte y abundantes aguas. Por intuición el
piensamento del llanero criollo comprendía que
los principios religiosos salvíficos se caracterizan humana e
históricamente porque buscan, o tienden hacia valores básicos espirituales como
la AUTOESTIMA, la estima al otro, la honestidad, el respeto a la Palabra. En otro nivel de la mentalidad llanera criolla, acercándonos a la muestra sociológica de Villanueva, se
entiende aquí por "Librepiensamento " una maduración equilibrada de lucidez de la
vida individual y comunitaria.
Las familias de Campo Elías Forero y de Bernabé Vera estaban ubicadas en fundos
distantes entre sí a tres o cuatro horas de cabalgadura, dependiendo si era en verano o invierno, ubicados al oriente y al occidente, respectivamente, de la vereda de Matasuelta.
Ellos se acercaban a los 30 años de edad cuando se autorizó la fundación de Villanueva.
Veamos el siguiente relato de Campo Elías Forero: " …. Hasta
mediados de 1949 estábamos viviendo en un sector donde el Río Guavio desemboca
en el Upía. En el caso del desplazamiento forzado de mi padre Campo Elías
Forero Forero, cuando él se decidió a huir con su esposa y ocho hijos, él ya
había conocido años antes el recorrido de dos días a lomo de mula hasta
Aguaclara. Aquí en Matasuelta él tenía un antiguo amigo, nuestro tocayo Campo
Elías Leguizamón quien le vendió a mi padre unas mejoras sobre usufructo de
baldíos, un terreno en el sector de la salida a Aguaclara donde actualmente
aparta la vía al aeropuerto, es decir al occidente del casco urbano actual,
terreno que hoy tiene parte en las veredas de El Triunfo y Banquetas, hasta los
linderos con la Reforestadora de la Costa. En el territorio de Matasuelta y en
su entorno vivían antes de 1949 familias que me acuerde, tal vez no de todas,
como: Los hermanos Lara (Prudencio, Cleo, Jeremías, Clea, Micaela y Roque),
cada uno con sus familias. Los hermanos Mora (Custodio, Misael, Aurelio y
Manuel), cada uno con sus familias. Antonio Segura, Arturo Mesa, Dolores Rojas,
Inés Escobar, Cristina Cano, José Díaz, Ignacio Torreyes. Es muy importante
insistir en que aquí me estoy refiriendo a una época particular de violencia
política entre 1948 y 1953, cuando liberales perseguían a muerte a
conservadores en algunas regiones del país, y en otras regiones los
conservadores nos perseguían a muerte a las familias liberales. En este
sector de los llanos orientales sentíamos pavor por la presencia de policías y
por las prédicas de algunos curas de esos años. También eran perseguidos y a
veces apedreados los de las sectas protestantes que empezaban a llegar al país.
Aquella guerra interpartidista dejó graves traumas. Desde 1950,
Sabanalarga, Aguaclara y Barranca de Upía habían quedado arrasadas por las
llamas. Aquí en los territorios de la Mesa de San Pedro y Matasuelta nuestros
conucos cultivados, nuestras sabanas de pastoreo y los ranchos de nuestros
fundos también habían quedado en cenizas con nuestros ganados sacrificados a
los chulos…‖
" …. Cuando
llegó el momento de eludir las comisiones de persecución y exterminio contra
liberales, en los inicios del año 50, los de Matasuelta abandonamos nuestros
fundos. Unas familias se desplazaron a otros territorios lejanos y las otras
familias nos quedamos escondidos en los montes del Upìa, del Tùa, y entre
tu-estas otras matas de monte de por aquí. Trasteamos los campamentos casi
durante tres años, de una mata de monte a otra, según fueran las noticias de
los correos clandestinos y de los vigilantes. Es decir que había correos
humanos y los vigilantes que recibían los mensajes de estos correos. Los correos
y vigilantes eran cargos que nos confiaban los comandantes revolucionarios
liberales a algunos jóvenes, enviando mensajes memorizados y hablados, no
se podía por escrito, por si acaso nos topábamos con alguna comisión del
ejército o de la policía, que aunque nos pudieran matar no encontrarían
nada escrito. Nosotros vivíamos clandestinamente entre una real
naturaleza. Mire que aquí en la sabana y en los esteros había
tantas especies de fauna y flora, es que era mucha la cantidad de aves y
animales de tierra y de agua. Y allí entre el monte, por más de dos años,
eran también de maravilla la flora y la fauna donde vivimos, con sus
propios peligros también, pero así nos tocaba, por favorecer nuestras
vidas. Permanecimos en el monte gracias a las bondades de la naturaleza
que nos enseñó muchas cosas , hasta aprender a convivir con culebras,
hormigas bravas, avispas, cachirres, abejas, piraña, tigre-jaguar, marrano
salvaje, entre los que fuimos conservados, que por voluntad de un Dios
Todopoderoso permanecimos sanos. "Bendito el que nos hizo " era
una de las expresiones sagradas de los viejos que con su Cristianismo
Original supieron vivir en suficiente sabiduría ".
FOGÓN Y SAL EN EL
MONTE. " . . . . Durante la
persecución, cambiábamos de sitio nuestros campamentos en el monte porque
eran clandestinos. Allí la gente sabíamos llevarnos y prestarnos
favores desinteresadamente como es la enseñanza de Jesucristo y bajo la
gracia de un Dios Todopoderoso. Nuestras familias, refugiadas en la
naturaleza virgen, teníamos necesidad de prender fuego en un fogón donde
cocinábamos de noche y necesitábamos la sal también. Por el bloqueo
militar todo el comercio se había suspendido en estas regiones. Antes del
bloqueo la sal se compraba por arrobas y por bultos, ya fuera en roca o
molida tanto para el ganado como para el consumo familiar y por eso
habíamos podido almacenar suficientes bultos pero no era fácil conservarla porque
la humedad la derretía y se acababa. Pero los viejos sabían que echando la
sal en un hueco en la tierra y tapándola, allí la sal se favorecía no
importaba si fuera invierno o verano. Enterrada la sal no se derrite. Eso
debe tener su explicación ". . . .
"… Pero no
estábamos igual de favorecidos con la necesidad de prender el fuego, pues
no había fósforos. Antes que se nos acabaran los poquitos que habíamos
comprado, los viejos recordaron sus tiempos de antes y con provisión de
troncos secos de palo'e corazón, se conservó el fuego por años. El palo'e
corazón seco no produce humo y así de día no nos delataba. Para sostener
de una noche a otra el fuego en el fogón, los viejos emplearon el recurso
de "Guarde la Candela" y era que el tronco prendido se vuelve brasa
y se envolvía entre la misma ceniza y así no echaba humo pero ardía
muy lentamente y no se apagaba, sino que este gran tizón encendido se
podía revivir en llama usando chamizos y ramitas secas. Palos finos de
corazón , como el cañafístol y el mora, con uno de estos troncos
gruesecito podía durar el tizón guardado de dos a tres días porque se
desgastan poco a poco . . . . .
" ….. EL 13 DE
JUNIO DE 1953 COLOMBIA TUVO TRES PRESIDENTES AL MISMO TIEMPO EN ESTE MISMO
DIA : Laureano Gómez llegó de España a retomar la presidencia que ejercía
el delegado Roberto Urdaneta, mientras el General Gustavo Rojas Pinilla se
tomaba el poder desde aquel mismo palacio. Despuecito de esta fecha es
cuando aparecen avionetas llamando al armisticio por medio de papeles
volantes o boletines informativos del nuevo gobierno del General Rojas
Pinilla. Al ver nosotros que los vuelos no eran de avión de bombardeo sino
que eran unos vuelos bajitos y amistosos de avioneta pequeña, salíamos a
recoger esos volantes durante varios días. Los volantes decían
" No más sangre, no más desolaciones a nombre de ningún
partido. Paz, justicia y libertad para todos ". El comandante
de la resistencia liberal Eduardo Fonseca Galán (ex militar) le dio
crédito a esta propuesta del General Rojas quien venía anteriormente
dirigiendo en el país la persecución a los liberales durante varios años y
que luego él mismo decidió ponerle término. Eduardo Fonseca nos alentaba,
nos decía " ¡Sí, sí ¡, eso es bueno muchachos " , ayudó
a crear confianza en la amnistía y en la entrega de armas. Después de
estos hechos en 1953 algunos de nosotros aceptamos y confiamos plenamente
en el armisticio y amnistía del General Rojas, es decir que no pensábamos
en continuar con las rencillas fanáticas, lo que quiere decir también que
algunos otros de los que quedamos vivos sí guardaron recelos y
desconfianzas. Aquel fanatismo partidista continuó durante décadas, el
rechazo entre unos y otros, a pesar de haberse establecido el Frente
Nacional. Se decía que los que bajaban de las colinas de San Luis se
volvían liberales y los que subían del llano a establecerse en Somondoco,
en San Luis o en otro municipio, por tradición conservador, tenían que
decir que eran conservadores. A pesar de la política bipartidista del Frente Nacional,
la tendencia fanática partidista permaneció en muchas mentes durante
varias décadas. Las excepciones son pocas y dignas de honor, en ambos
partidos, cuando sin retractarse de su partido eran acogidos y respetados
por su gran personalidad ….."
LA AUSENCIA DE CAMPO
ELIAS EN LA ENTREGA DE ARMAS EN 1953.
Aquí, es
significativo anotar el propio relato del narrador:
" …. Después
de la entrevista con un productor de cine el 11 de julio de 2010, quien
trabajaba el tema de la época de la violencia, aquel productor me reclama
que Campo Elías no figuró en fotografías ni relatos durante la entrega de
armas y yo le respondí : " A mí me invitaron casi todos los jefes
guerrilleros de Casanare y Meta. El grupo de Fonseca Galán, el grupo que
quedaba de los Bautista, los de Álvaro Parra, los de Guadalupe. Yo me
rehusé a esos protagonismos porque no me parecía importante ese
protagonismo. Yo no me fanatizo hasta el punto de ocultar o tolerar las
corrupciones o malas acciones dentro del mismo partido. Los fanáticos
toleran las corrupciones de sus jefes. Mire que yo sostuve discusiones con
algunos de mis jefes de la comandancia revolucionaria, durante varios
meses que duró el proceso de entrega de armas. Después de haber sido
elogiado por aquellos jefes que me conocieron, nos contrariamos y
discutimos, aunque directamente nunca pasamos a mayores . Y después del
armisticio algunos buscaron la manera de pavearme y joderme. Mataron a un
cuñado y a mi padre también lo perseguían. Yo no es que me lave las manos
, que yo soy un santo, no. Pero a mí no me cuadra nada de querer o
intentar hacerle mal a alguien, ¡ nunca ¡, y así el Todopoderoso Dios me
ha salvado de muchos peligros, sobretodo de malintencionados congéneres
"
"… Después del
armisticio, a finales de 1953, se desintegraron los grupos o comandos de
revolucionarios combatientes. Casi se pelean cuando se reunieron para
discutir el proceder de la entrega de armas. Luego de la entrega de armas
se individualizaron, la mayoría se " amañaron " con esa
vida de mandar con las armas dominado a las personas y algunos se
dedicaron al abigeato, otros querían vivir honorable y honestamente. Pero
entre todos se interpuso la mentira, la envidia, el asecho y las
divisiones. Muchos años después de aquella entrega de armas, cuando el
mandato del doctor López Michelsen, hubo otra convocatoria a Palacio pues
quedaba un reducto de ex revolucionarios que anteriormente no habían sido
invitados. Se formó un grupo con Rosendo Huertas, alias "
peligro "; Ricardo Leal, alias " cabotrueno "; un
tal Manuel alias " carafea "; Vicente Fernández y otros que
ya no recuerdo.
" . . .
Entonces también yo me rehusé rotundamente a ir a Palacio como reserva
de la revolución del llano. Yo les dije : " Esos señores del
Palacio no nos conocen y no les interesa ", pues yo les
recordaba su ausencia del país e inoperancia durante la persecución
política anterior. Los jefes liberales López, Turbay, Echandía, Santos y
Lleras, salieron al extranjero. Ellos no fueron nuestros jefes durante
esta guerra. De modo que yo no veía ningún motivo real o valedero para que
el doctor Lòpez Michelsen me viniera a citar a Palacio. A mí no me gustaba
ese protagonismo de ir a presentarme como un excombatiente. Tampoco lo
hice en el primer llamado de Rojas Pinilla aunque quedé admirado y agradecido
con él , sí, por el hecho de que un conservador, jefe
militar, exterminador de los liberales, él mismo hubiera decidido parar
con esas masacres. Aquí en Villanueva, mi protagonismo
fue la educación. La lucha mía fue por la
escuela y luego por el Colegio ….".
" …. El
ambiente general desde 1954 fue de reconstruir nuestros fundos
en Mastasuelta y seguir viviendo comunitariamente. Vivir en comunidad
entonces quería decir que nuestros lotes (manadas) de ganados, bestias y
porcinos pastaban libres vagando entre sabanas y esteros. El ganado y las
bestias debían estar herrados (marcados con hierro candente) aunque
también había animales cerreros, montañeros o cimarrones
-cachilapos- (sin marca). Cuando cumplíamos alguna tarea en el Hato
La Libertad, los vaqueros nos poníamos de acuerdo cada veinte días o cada
mes, en salir a revisar nuestros fundos y apartar los lotes de ganados,
recogíamos los rodeos, y los apartábamos a cada fundo correspondientey los
del hato La Libertad también los conducíamos al territorio de la
fundación, porque a veces los rodeos se retiraban mucho de sus
fundaciones. Y así al cabo de varias semanas repetíamos la misma tarea en
nuestros fundos, porque no había cuerdas de alambre por ningún lado y los
lotes de ganados volvían a desparramarse libremente por estas sabanas y
esteros …―.
" … Por más de
una década yo me ocupé de las faenas llaneras en el hato y en algunos
fundos. También estuve encargado de la ganadería de la finca Vuelta la
Grande tal vez en el año 1957, finca entonces de unos americanos, donde ahora
está la Reforestadora de la Costa. Allí llegaron no sé por qué
motivos, por varios días, los doctores Gonzalo Vargas Rubiano y un doctor
Castro Martínez, personajes de fama nacional. Una madrugadita el doctor
Castro Martínez le dijo al doctor Vargas: " Gonzalo, levántate a
mirar una mañana en el llano". El doctor Castro quedaba lelo
admirando la salida del sol con los miles de loros y otras aves cantoras
en estos bellísimos amaneceres de la naturaleza virgen . . . . . .
"
spspspspsp
SOBRE ALGUNOS
PERSONAJES NOTABLES, CAMPO ELÍAS CONTINÚA NARRANDO :
" … DON
ESTEBAN LARA. En mi familia, fue mi padre quien a alcanzó a conocer
personalmente a don Esteban Lara en las primeras décadas de 1900, y sus
recuerdos estaban fresquitos en las memorias de las gentes cuando
yo llegué a Matasuelta. Uno podía creer que sí era posible tener tales
capacidades
y agilidades de
torear toro bravo, torear y matar el tigre, torear marrano montañero,
faenas que muchas veces protegían de peligros a otras personas, que no las
hacía comúnmente el llanero. Yo podía creer todo lo que se decía de don
Esteban porque también vi personalmente varios casos en otros llaneros,
aunque decían que no se le igualaban a don Esteban. Pero es que a uno le
da miedo de ver a alguien que se domine, se controle ante un peligro como
el ataque de un animal de furia salvaje. Torear tigre no es con
capote sino con lanza y horqueta, con el fin de matar al tigre, que
realmente es familia del jaguar grande. A un toro común, cimarrón,
cualquier vaquero o llanero lo puede capotear, pero al toro bravo, ya lo
vamos a explicar más adelante que no se le mete nadie a capotearlo,
excepto estos personajes tan excepcionales como don Esteban que no se
consiguen a toda hora. Ya sea en el caso de torear un toro bravo o un toro
cimarrón común, el ARTE DE CAPOTEARLO, además de exigir un dominio de sí
mismo, con impavidez, sin miedo alguno, consiste en que el vaquero que se
le enfrenta al toro, este vaquero no se cansa en 20 o 30 minutos de faena,
porque poco se mueve, aunque hace movimientos ágiles, pero permanece
tranquilo y calmado, cuando va manejando el poncho llanero, capote, en
cada embestida. El toro sí se cansa y luego lo dominan los otros vaqueros
.―.
" … A don
Esteban Lara lo llamaban -EL ESPIRITU DEL LLANO- y este mismo
distintivo todavía se le sigue aplicando a alguno de su estirpe como
su bisnieto Pedro. Mi sobrino Alexander Martínez nos ofrece este
testimonio :
--" Pedro Lara
es una especie de símbolo de ese conjunto del hombre con la tierra, conjunto
que hoy en día ha desaparecido. Y es que también los ganados de ahora son
mansos, criados en cautiverio de corrales y potreros cercados con alambre.
Anteriormente estas eran sabanas bravías y había el conjunto de bravura de
animales con el llanero criollo bravío también como los tipos de esta
categoría de Pedro Lara .. "-.
( Continúa
Campo Elías : " … Se escuchaba también como algo muy cierto que don
Esteban asistió en Bogotá a la inauguración del Circo de Toros de Santa
María cuando el Presidente Rafael Reyes, y decían que lo de allí fue un
espectáculo de todo el país con toros y toreros traídos de España, pero
que uno de esos toros resultó ser bravísimo, algo de tenerle miedo los
mismo toreros y así fue que con el terror de los toreros españoles, el
toro los arrinconó en los burladeros.
" . .
.Entonces don Esteban pidió permiso de entrar al ruedo, soltó la argolla de
su pañuelo raboegallo y comenzó a hacerle la faena del capoteo llanero a
ese toro de casta. Eso debió ser admirable. Se hicieron amigos con el
presidente Reyes. Dicen que don Esteban era un "chiquito
aguajibao" y que además corría tan veloz, y aún más veloz que un
caballo al galope y que tenía el Espíritu del Llano … ".
NOTA DEL COMPILADOR : a continuación se inserta el testimonio de
Augusto Romero Farrera :
AUGUSTO ROMERO FARRERA : " En la tradición familiar, mi padre nos decía
que había sabido de fuentes creíbles lo que se decía de don Esteban Lara, a
quien llamaban -El Espíritu del Llano-, quien podía correr más veloz que un
caballo al galope y que era tan bajito de estatura que para dormir
colgaba un chinchorro de un garabato y se metía allí formando un jotico y
ahí dormía ".
" … DON
JEREMIAS LARA ALDANA, mi suegro, hijo de Esteban y hermano de
Prudencio. Jeremías es otro personaje importantísimo por ser portador del
"espíritu del llano", es decir un benefactor de la comunidad por
sus particulares capacidades naturales de hacer en bien lo que otros no
pueden. Estas personas no cobran por sus servicios. Jeremías rezaba la
mordedura de culebra, ya fuera en animales como ganado o bestias de
montura o en personas. Claro que debido a que estos accidentes peligrosos
de veneno de culebras no eran muy frecuentes en las personas, Jeremías
vivía como un vaquero común y corriente, como un llanero que trabaja en su
fundo con su familia y hacía todos los trabajos propios de estas tierras.
Ejercitaba estos dones de curandero cuando llegaban a su fundo a buscarlo
en una emergencia de mordedura de ofidio. Jeremías también
-rezaba- la gusanera. El lector ya debe saber por muchas
referencias en la historia del llano que estos personajes benefactores,
como médicos naturales que son, llamaban "rezo" al ensalmo con
una oración. Vea cómo se presentaba cada caso. Si aparecía un animal
recién mordido de culebra, o sea que daba muestras de malestar y
al examinarlo se descubría la hinchazón, los vaqueros buscaban a Jeremías
y él procedía a rezar al animal a distancia, con sólo escuchar la noticia
que le traían. Cuando era gusanera, o sea que el ganado se agusanaba y
se empezaba a podrir por las patas, pues igual, Jeremías recitaba el
ensalmo bien fuera en presencia o en ausencia del animal enfermo, y al
otro día estaba limpio y libre de esa podrición. Igual cuando alguna
persona era mordida por culebra venenosa, el rezo era efectivo, la culebra
moría y el paciente se salvaba … ".
NOTA DEL COMPILADOR : Se inserta a continuación un aporte de Libardo Rodríguez, sobrino de Casmpo Elías:
LIBARDO RODRÍGUEZ
FORERO : " Sobre los "rezos" curativos, no se puede cobrar
nunca porque el curandero pierde el poder. El recibe lo que le den a voluntad
del beneficiado. Pero sí es cierto que se puede curar con rezo, porque sí hay
un Dios que lo ampara. Mi tía Oliva ea como un vidente muy especial. era
delicada, humilde y silenciosa en sus visiones, que eran ciertas, pero ella se
aislaba en estos temas al ver la ceguera espiritual de mucha gente ".
( Continúa Campo
Elías ) : " … MANUEL ESCOBAR Hay otros casos rarísimos, por
ejemplo, el de Manuel Escobar, por sobrenombre "Kiriko", de
familia raizal criolla. Pero hay que imaginar primero que en estas
sabanas, esteros y matas de monte, aunque uno sea un baquiano, se puede
uno a veces extraviar andando de día. Hay que conocer ciertos pasos y
sitios donde uno puede desviarse, aún siendo baquiano, y perderse del
camino que traía. Kiriko, durante la resistencia contra la persecución de
los años cincuenta, era el tipo que no fallaba en guiarnos, inclusive de
noche, intuyendo además los movimientos de las comisiones militares y
ubicando los pasos difíciles de los caños y así los evitaba. Ese tipo no
nos falló cuando nos tocaba desplazarnos clandestinamente con
nuestros campamentos, o cuando guiaba a los correos clandestinos de un
campamento a otro, así fuera de día o de noche. Esto es de imaginarse cada
uno, porque ahora no hay lugar de explicarlo todo. El talento que tenía en
las noches de reubicación, para decirnos, "hay que pasar el caño en
tal parte". Tenía el mérito de decirnos "vámonos por aquí"
y todo nos salía bien. Uno no podía hacer eso por más baquiano o llanero
que fuera. Yo no sé qué brújula o "brúu- jula" (ja, ja,) lo
manejaría o cómo, no sé. Pero es algo respetable, por las vidas que nos
salvó. De día también se guiaba en surales y en sitios que nadie ni
él mismo conocía con anterioridad. Daba tan preciso en los sitios. Esos
son los espíritus del llano … ―.
ANTONIO FORERO Y LA
FUNDACION DEL PUEBLO : " … Antonio Forero Romero, primo hermano
mío, fue una persona clave en la fundación de Villanueva. El era médico
naturista y –después de la guerra- fue farmaceuta también cuando tuvo una
droguería en Aguaclara. Luego se vino a vivir con nosotros en casa de mi
padre por varios años y también en un fundito de ermitaño, hasta que se
independizó en su lote urbano. Además de yerbas curaba con inyecciones de
los laboratorios Bayer. Antonio conocía las enfermedades del llano y con
su medicina recorría fundos y fundaciones prestando su servicio eficaz
entre 1953 y 1980, no solamente en la Mesa de San Pedro y el Hato La
Libertad, pues también pasaba el río Túa hasta fundaciones de Tauramena y
Monterrey. Antonio sabía sus secretos de mezclar varias ampolletas de la
Bayer, además de las yerbas curativas. A nadie le dejó sus secretos de
cuáles ampolletas mezclaba. Por destino Antonio era la persona más
indicada en gestionar el memorial escrito para la fundación de Villanueva,
tanto aquí en el territorio como allá en Tunja, por su intervención como
médico entre tantos ires y venires, de fundo en fundo, Antonio nos
facilitó ponernos de acuerdo por medio de razones que él comunicaba sobre
la intención de fundar el pueblo. Yo también aprovechaba las reuniones
más numerosas que eran las de los vaqueros en las fundaciones del Hato
La Libertad que entonces administraba Bernardo Doncel y allí
procurábamos despertarle el interés a los vaqueros sobre la necesidad que
teníamos, de que aquí se iría a fundar un pueblo porque necesitábamos
escuela. Fue entre 1960 y 1961 cuando Antonio llevando sus inyecciones,
Bernardo Doncel con su esposa Luisa Nieto, otras personas, y yo en mis
desplazamientos como vaquero, íbamos insistiendo con paciencia y
constancia en que la gente se decidiera a firmar la solicitud destinada a
Tunja, de fundar una Inspección de Policía en Matasuelta. Entonces Antonio
y yo todavía nos poníamos de acuerdo muy bien porque a ambos nos
interesaba esta gestión común y, con el apoyo de otras personas,
necesitábamos proteger el baldío destinado al futuro pueblo. A algunos nos
interesaba fundar una escuela y a Antonio le interesaba tener su propio
lote. Mire que es hasta ahora (2011) que tengo 76 años de edad que se me
viene al pensamiento algo como una suposición o imaginación que quizás
existe un destino en todo y por eso fue desde 1958 que se destinó que
gente de toda Colombia se viniera a vivir a Matasuelta, pues fue porque
se había creado el Frente Nacional, y en 1962 teníamos Gobernador Liberal
en Boyacá, fue por eso que nos animamos a solicitar este baldío,
aunque algunos todavía desconfiaban de un presidente conservador, el
doctor Guillermo León Valencia .. ‖.
" … Desde
mediados de 1961 Antonio portaba el borrador del memorial y duró meses así
leyéndoselo a las personas en cada viaje en que atendía a los enfermos.
Las distancias que tenía que recorrer Antonio a caballo o en mula, con su
memorial en manuscrito envuelto en un plástico dentro de su carriel
de paisa donde cargaba las ampolletas y las jeringas, eran
distancias considerables. Partiendo aquí de la casa de Matasuelta,
teníamos por ejemplo: hasta Santa Helena 8 ó 9 horas; al Secreto 7 horas ;
a Guayabal y Los Gemelos (hoy Fical-Buenos Aires Alto) se gastaban de 4 a
6 horas; a Puerto Miriam de 6 a 7 horas, dependiendo de la época del año.
Los otros fundos, de los Laras y Moras eran más cercanos a la casa de mi
padre. Pero no todas las personas ceduladas querían firmar a pesar de que
ya estaban bien informadas del contenido del memorial. Unas no firmaban
porque todavía podían sentir cierto temor al hacerle una petición al
gobierno de arriba; otras personas no firmaban porque ya habían sido
influenciadas en que no era necesario hacer un pueblo con escuela, porque
querían usufructuar el terreno baldío y otros pensaban que al firmar, el
gobierno se iba a venir a expropiarnos de nuestros derechos de usufructo
de estos baldíos. Pero cuando por fin, como en agosto del 62, creímos que ya
estaba lista la gente, los que ya se habían decidido a firmar, entonces de
repente mandamos razones a todas partes con los vaqueros y nosotros
también personalmente dábamos la misma razón que como ya conocían el
memorial ahora les tocaba firmarlo porque Antonio se iba camino a
Aguaclara a mandarlo pasar a máquina, y así fue que se pasó a unas hojas
de papel sellado en uso en esas décadas, y durante dos meses recogió las
firmas y luego, en octubre, llevó el documento a Tunja … ‖.
Oleo de Salvador Cantor
LOS SURALES
DE ANTONIO. . " … El se casó siendo joven pero su matrimonio se
rompió a los pocos años y tampoco hubo descendencia. Además de las visitas
como médico, él también hacía algunas visitas familiares y a algunas
amistades, pero había que llevarle la idea en sus ideologías; quiero decir
que Antonio era fanático si esta palabra quiere decir, por ejemplo, que
él se enfurecía si no le creían todo lo que él decía o lo que él creía en
asuntos de esoterismo o de política. El no quería hacer el mal a nadie
pero no podía admitir que otros le dijeran que estaba equivocado en sus
ideas. Decía que todos los godos y todos lo curas eran iguales
refiriéndose a la persecución político-religiosa. Antonio sufrió
muchas decepciones por su fanatismo, sin embargo, varias veces cambió de
grupo esotérico-religioso. Yo siempre respeto a tantos predicadores desde
protestantes y católicos hasta aquellos otros, pero a mí nunca me pareció
necesario que tenía uno que permanecer en algún grupo religioso pues a
nadie se le olvida que existe un Dios Supremo y que debemos portarnos
justamente, pues es algo que nos pertenece como criaturas. Pasando los
años, esta independencia en mis ideas fue uno de los motivos de discordia
con Antonio. Con él nos llevamos bien sin discordias hasta finales de la
década del 60 … .
" ….. A modo
de anécdota voy a referir otras desilusiones que él sufrió cuando se le
cortaron bruscamente sus preferencias amistosas con las mascotas
más bellas que él tuvo. Al armisticio de Rojas Pinilla, Antonio le creyó
sin mayores dudas, y también cuando se formó el Frente Nacional con el
mandato de
Alberto Lleras
Camargo, pero Antonio no creía en Guillermo León Valencia, desconfiaba de
este nuevo presidente. "Esos godos son todos lo mismo " decía.
Se había comprado un fundito a orillas del Tua donde construyó un refugio,
durante los meses en que ya llevaba adelantado el memorial para fundar
Villanueva. Por esa época Antonio no comía carne, fue vegetariano durante
varios años y por allí construyó un ranchito entre un sural, donde el
río Tua hacía un recodo al pie de un barranco alto, y el agua formaba un
pozo
grande, bonito.
Antonio había sembrado plátano, yuca, caña en pequeña escala. Le gustaba
divertirse con los centenares de peces, cachama, yamú, sardinata,
bocachico, variedades de bagres que se amontonaban y le aleteaban
recibiéndole comida. El no pescaba y estos animalitos lo querían mucho
porque les picaba yuca y plátano. También tenía otros acompañantes
en tierra : picures, tinajos y aves que también le recibían comida, y
hasta los chigüiros venían a comerse la caña de azúcar, entonces Antonio
los espantaba
asustándolos. A dos
o tres horas de a caballo desde Matasuelta a mí me tocaba ir a visitarlo
de vez en cuando para ver cómo estaba o para llevarle las razones de que
lo esperaban con sus inyecciones para el paludismo que era una enfermedad
curable, porque cuando la viruela se presentó fue gravísimo. Tampoco había
dengue todavía … .
" … Pasando el
tiempo, animado por tener gobernador liberal en Boyacá, ( el doctor Gustavo
Romero Hernández ),cuando por fin llevó el memorial a Tunja, trajo de regreso
una remesa de sus inyecciones de marca Bayer, pero él quería seguir
viviendo solo allá en el sural. Entonces le llegaron las desilusiones:
primero, a un fulano que bajaba por el río cuando Antonio no estaba, se le
arremolinaron amistosamente todos los peces y este personaje le hizo una
matazón terrible hasta donde más pudo ahuyentando los peces. Pocos días
después, a Antonio le llegó al rancho una perrita sarnosa, enflaquecida,
enferma y Antonio le dio comidita y este animal se quedó en la casa con
él. Pero la felicidad de este animalito fue corretiar a cuanto animal se
acercaba al rancho y le ahuyentó a sus mascotas de tierra, incluso a
Antonio le tocó matar cachicamos y lapas que la perrita encuevó,para quitarse
la ladrizón de encima. Un día me llegó a la casa en Matasuelta con
bastante carne de cachicamo asada y salada, y también trajo la perrita y
me la regaló. Este
animalito aquí me sirvió de mucho en la cacería de cachicamos y lapas. La
otra desilusión de Antonio que terminó por sacarlo de esa soledad fue que
una vez que llegó a su rancho en el sural, se percató de que le habían robado
sus libros y su barbera. Desde entonces dejó de afeitarse y durante varias
semanas salió a donde los vecinos y hasta aquí vino, protestando y decía
que ese robo iba a ser castigado por el destino. Pero después, cuando un
día regresaba al rancho encontró un costal nuevo, de fique, en el que
estaban sus libros y su barbera. Pero él no se volvió a afeitar más. Poco
después tuvo que viajar otra vez a Tunja a traer copia de la Ordenanza
aprobada donde había un artículo que autorizaba la fundación
esperada por nosotros.
Allí en Tunja, Antonio posaba en casa de la señora Edelmira Ávila de
Barrera, Jefe de Archivo de la Asamblea Departamental y nos decía que
compraba sus ampolletas de la Bayer en la Droguería Mundial "
A continuación se insertan algunos relatos de
CASOS DE
NO CREER PERO FUERON CIERTOS,
como fenómenos
sobrenaturales, epifenómenos, que ocurrieron en circunstancias extremas
durante el período de tres años intensos en este sector de Casanare. Las
fuertes emociones y estados irregulares de la vida, donde el pan diario
de la subjetividad es la incertidumbre en lo impredecible. No es por decir
que estas
son alucinaciones o
delirios obsesivos. Es que esto es real. Se abre una ventana al mundo
paralelo, imperceptible a los sentidos en estado ordinario. Miremos la
mitología griega que abunda en estos ejemplos. O en la
Biblia judeocristiana, Números XXII, o en la transfiguración de
Jesucristo, donde hay almas y ángeles invisibles que a veces se hacen
visibles Antes de continuar con las narraciones de Campo Elías, veamos
primero dos de los episodios que nos muestra Angel Amézquita, en su obra
" Memorias de Orocué "
ÁNGEL AMÉZQUITA―
"….El señor que venía del Pauto le pidió ayuda alsacerdote, pues
contó que allá en la fundación que tenía, a una hija de 15 años se le
aparecía el diablo y ya no la dejaba dormir, ni comer y ya estaba muy
flaca y enferma…. Solamente la niña era quien lo veía, que ellos no
veían nada ni sentían nada… (llegaron)…con todo el equipo para correr
al Mandingas. (Mandingas no vino aquella noche en que estaba el cura
allí), pero al otro día : al momento del desayudo: la niña : ― Padre allí
está el duende. .-
Dónde hija mía ?,
no lo veo .- Padre él está encima de aquel tirante, sobre la pared. Está
cogiendo una manotada de tierra y se la va a echar al plato. ¡ Vea su
plato Padre ¡- . Efectivamente en el plato había un poco de tierra… El
cura aconsejó a la familia que trasladaran a la niña a algún pueblo donde
se le
pudiera brindar
mejor protección … "
" .. . . otro
duende indomable, fue conjurado por doña Dolores Córdoba famosa por su
valentía, fue burlada también por el duende, y en este caso , pasado
el tiempo, hasta que el obispo viajó desde Támara, Monseñor Nicacio
Boliza. El duende no se burló de monseñor, (después de que él se regresó,
el duende
siguió molestando a
la dama, pero como el Obispo les había recomendado que fueran de la
fundación del hato El Guandul hasta Orocué , el espanto la siguió hasta
Orocué y le obedecieron al obispo, le colocaron bastantes espermas, y le
pagaron misa al párroco por tal motivo y ¡efectivo¡ el duende dejó
de molestarla para toda la vida ". ( Hasta aquí el extracto del libro
de Ángel Amézquita).
En el sentir
religioso de Campo Elías Forero no se fermentan dogmas. Es aséptico y
equilibrado en sus sentimentos y elucubraciones místicas y honorable en la
práctica de los valores humanos positivos. Ni en su ánimo, imaginación o
mentalidad, a Campo Elías le caben supersticiones ni falsos misticismos.
Sin embargo, él mismo tuvo que ser testigo directo de varios fenómenos que
no le cabía negar, fenómenos semejantes a las epifanías nativas que actualmente
la ciencia bioenergética y biofísica están rescatando de limbo de las
supersticiones.
CAMPO ELIAS
CONTINUA NARRANDO ."... .Lo que llaman supercherías o leyendas y
mitos, yo mismo soy muy prudente en no dejarme llevar por fantasías
imaginarias, pero asimismo el destino ha puesto frente a mí casos por los
que me toca creer que sí hay otro mundo, paralelo a éste, de tal modo que
nosotros no tenemos visión de él, pero que allí pueden haber espíritus
que influyen en este nuestro mundo que llamamos visible. Voy a relatar algunos
de estos casos que me tocó presenciar. . .."
"… EL POLICIA
CERRADO . . ." . . Así como había diferentes clases de curas,
con sus maneras contrariadas de ser religiosos, diferentes personalidades
de liberales y de conservadores, unos eran sanos y otros antisociales,
también había diferentes clases de comandantes tanto revolucionarios como
militares del gobierno, que demostraban varias formas de violencia. Unos
buscaban motivos de desarrollar crueldad y otros eran serenos que sabían que
la guerra no era para matar gente por sólo matarla. Yo no es que me lave
las manos, que yo sea un santo, no, pero a mí no me cuadra nada de querer
o intentar hacerle mal a alguien, ¡ ¡nunca ¡, y así el Todopoderoso Dios
me ha salvado de muchos peligros, sobretodo de malintencionados congéneres
.No quiero referirme a algunas atrocidades y torturas vistas en la
violencia entre el 48 y el 53 por todo el país, y por parte y parte de los
dos bandos: los gobiernistas conservadores y los liberales, pero sí les invito
a que observen este relato: los revolucionarios liberales en 1952,
teníamos prisionero de guerra a un militar de la policía al que luego de
hacerle juicio de guerra, y sin dejarle saber a este prisionero que había
sido condenado a muerte, se decidió tomarlo como chivo expiatorio o
conejillo de indias, destinándolo en la prueba del poder de una bomba
hechiza, que se podía detonar a distancia con cable subterráneo y con una pila eléctrica.
Enterraron el cable y la bomba, y cerca de este artefacto clavaron una
estaca de palo disimulada, como señal. El prisionero no sabía nada de este
explosivo y cuando le llegó la hora de ser ejecutado, lo mandaron a que se
parara cerca de la estaca, sobre la bomba enterrada. Pero vean la sorpresa de todos,
que al hacer estallar la bomba, la onda explosiva levantó al hombre y lo
aventó lejos, como a cinco metros, pero sin causarle ni la menor herida,
ni por la metralla , ni siquiera por la quemadura de la pólvora.
Este hombre sorprendido y asustado, se levantó del piso, se miraba y se
palpaba por todo su cuerpo, y decía, - pero no me pasó
nada -. Igual fue nuestra sorpresa pues se nos hizo muy raro
que no sufriera herida ni leve ni profunda por la metralla. Comprendimos
todos inmediatamente que este milagro solamente
pertenecía a los mismos designios del Supremo Destino, que también nos
había librado del peligro de muerte violenta a nosotros, aunque en otras
circunstancias, naturalmente, pero que igualmente fuimos salvados por
la voluntad de Dios o de sus jerarquías espirituales. La reacción nuestra
fue muy acorde con nuestras convicciones de respeto a la justicia divina,
y entonces decidimos escoltar al prisionero, dejarlo en un sitio seguro
sobre un camino que lo llevaría a su libertad. No hubo más maltratos ni
violencia con este
prisionero porque
afortunadamente no teníamos aquí a ningún comandante revolucionario que
padeciera de sevicia … ."
EL CHISPORROTEO Y
EL GUERRERO SIN CABEZA ( Continúa Campo Elías ) :
" … Todavía
estábamos en guerra. El ejército había establecido cuarteles en Tauramena,
en Monterrey y en Barranca de Upía. Una noche estábamos escondidos en el
monte con Antonio Forero a pocos kilómetros de Barranca. Ya habíamos
apagado el fuego del fogón y quedó guardado el tizón entre las brasas. En
nuestros chinchorros charlábamos calmadamente mientras nos cogía el sueño
cuando de pronto, sin haber brisa, ni viento, ni algún
material combustible en la brasa, empezó a salir un chisporroteo del
fogón, con suaves detonaciones que nos hizo sentir algo de temor y nos inclinamos
sobre nuestros chinchorros que estaban guindados a pocos metros del fogón.
Así como empezó, así terminó, sin saber cómo ni por qué tal chisporroteo
que lanzaba cenizas y pequeños carbones hasta cerquita de nuestros
chinchorros.
Permanecimos
durante un buen rato pensativos y callados por tal fenómeno pero después
empezamos a escuchar disparos de fusil y ráfagas de metralla por los lados
de Barranca. Sería como la media noche y por la insistencia del tiroteo
pensamos que posiblemente se había entrado la revolución a merodear el
cuartel de Barranca, que tal vez alguno de nuestros
comandantes revolucionarios estaría atacando al ejército. Después, cuando
había pasado la violencia, estábamos en los meses del proceso de
armisticio a finales de 1953, teníamos que ir al cuartel a presentarnos y
registrar los nombres de las familias que estábamos cercanos al cuartel de
Barranca, donde además les vendíamos yuca y plátano a los militares, y
hablando en buenos términos con el teniente y con otros antiguos de ese
puesto militar, algún día nosotros les preguntamos que si alguna noche por
tal fecha hubo ataque al cuartel por parte de nuestros revolucionarios, y
les dijimos sobre el tiroteo intenso y prolongado que habíamos escuchado
aquella noche. Claro que del chisporroteo no les comentamos nada. La
explicación que nos dieron el mismo teniente y algunos suboficiales que
estuvieron en esos meses anteriores, es algo de no creer fácilmente. Nos
refirieron que, inicialmente como a la media noche, un vigía desde la garita
con su reflector había detectado un bulto que se escondía cerca del muro
del cuartel, y dio el aviso. Luego desde una garita y otra lo ubicaban de
cuando en vez, porque se trasladaba ágilmente de un sitio a otro y
le hacían disparos. Otro militar nos dijo ― " ¡ Ah ¡, eso fue
cuando se nos metió el hombre sin cabeza " y nos
explicaban : ― " este fantasma negro, figura humana sin cabeza, de
pronto ¡ pum ¡ desaparecía de allí y aparecía aquí en
otra trinchera". Los militares que testificaban de esa fecha nos
relataron que el hombre sin cabeza aparecía, corría, desaparecía, volvía a
aparecer, rodeando velozmente el cuartel, y así los tubo durante tres
horas, hasta que amaneció, gastando munición y haciéndoles creer que era
una coartada de los combatientes liberales … ".
" . . .
Hay vainas que los hombres desconocemos o que no les vemos explicación,
pero que fueron de la vida real y no sabemos a qué se debe eso, como el
chisporroteo, como si fuera un aviso que el - alma - del hombre
sin cabeza nos hubiera advertido a Antonio y a mí que iba a producirse
este tiroteo. Otros casos como el de KIRIKO, nuestro baquiano iluminado, o
como el caso del SILVADOR, o del GIGANTE y otros duendes y fenómenos como
el del PRISIONERO ILESO sobre el estallido de la bomba, o como el caso
del DUENDE que estaba enamorado de una jovencita y que no la dejaba en paz
de día ni de noche y no pudieron sus familiares protegerla de semejante
acoso invisible para los familiares, hasta que le contaron a Eduardo
Fonseca Galán, y este comandante fue personalmente a visitar a aquella
familia y el mismo Eduardo resuelve trasladar a la jovencita a otro
refugio y es cuando le toca hacerle disparos al piso a lado y lado,
lanzándole voces de insulto al duende invisible, mientras la llevaba de la
mano y la sacaba de aquel sitio. Más recientemente , en
pleno siglo XXI relatan casos como los sucedidos a algunos jefes
paramilitares que recibían MUENDAS DE DUENDES invisibles, les propinaban
muendas a fuete, que sentían el dolor propio y que los otros paramilitares
presentes no podían ver ni oían nada "
.
EL. CASO DEL
GIGANTE DE LA MESA DE SAN PEDRO
" …. Teníamos
un campamento clandestino en la mata de monte del sector actual de la
Reforestadora. Un vigilante ocultado al borde de la mata estaba visajeando
en lontananza sobre el banco de sabana por si veía venir alguna comisión
de militares. De pronto viene al campamento y nos dice - ¡ vengan y miren
!-. Vimos a un tipo gigante que sobresalía por encima de los árboles de
la otra mata de monte cercana. Los primeros que acudimos alcanzamos a
ver este fenómeno, y en la algarabía que formamos empezó a desaparecer.
Luego bordeamos la mata y llegamos al otro lado de la sabana y buscamos,
pero no lo vimos ni encontramos rastros del gigante … ".
OTRO DUENDE EN
PLENA LUZ DEL DIA. "…. También ocurre entre una sabana y la mata de
monte. Siete jinetes se desplazaban desde la mata del güichiral hacia los
bajos de Barranca, pero como venían con sus bestias no podían usar todas
las picas ni las trochas inundadas por ser algunas intransitables a
caballo, les tocaba salir a campo abierto y trotar sus caballos por la
sabana con el peligro de que de pronto les apareciera un avión bombardero
y los atacara con metralla. Tenían previsto que, en tal caso, los jinetes
se dispersarían a todos lados y así el avión no le tiraría a ningún
jinete individual. Pero no apareció ningún avión, sino que de pronto
vieron que allá al borde de la mata, al pie de un palo, estaba recargada
una persona, una figura humana, quieta. Detuvieron sus bestias y
concentraron la mirada en ese sujeto como a dos cuadras de distancia de
ellos. Sin pensar en otra cosa, ni en los aviones, se quedaron lelos por
semejante quietud de ese sujeto. Se propusieron cercarlo y se abrieron en
abanico y se le acercaban a ver si el fulano se internaba en la mata de
monte o qué hacía. Pues mire que se les filtró entre el ruedo y se echó a
correr ―a miles‖ pa·dentro de la sabana y los jinetes con sus
caballos a rienda suelta lo seguían y no pudieron alcanzarlo, se
les escondió por la
otra orilla de la mata de monte y no se supo qué era, este fenómeno tan
veloz, quizá como el caso del veloz también don Esteban Lara (ver en
párrafos anteriores).Este relato me lo contó Pedro Pauna, quien era uno de
aquellos siete jinetes … ".
"… EL
SILBADOR, ¿ Es un ave ?. No se sabe qué es, a pesar de que durante muchos
años y varias veces al año, siempre que se oye es un aviso de que alguien
conocido acaba de fallecer. Si lo escucha, a usted le avisa, dentro de la
quietud de la noche. Si escucha algo como un silbido raro, fuerte,
algo impresionante, extraño. Cuando en el rancho de un fundo se lo
escuchaba silbar, al otro día salía la gente a ver quién pasaba por los
caminos pa·preguntarle - ¿Quién se murió ? -, pues anoche silbó el
silbador …."
"…. Y YO AHORA
PIENSO, ¡Qué pasó ¡, ¿ por qué desaparecieron estas leyendas?.
No me imagino por qué, pero yo pienso que esas son cosas desconocidas o
extrañas. Yo creo que hay otro mundo paralelo a este, con miles de seres
que no vemos ni oímos con nuestros sentidos físicos. Todos los seres
humanos y animales tenemos muchas defensas, muchos seres espirituales
invisibles que nos cuidan y cuando alguien o un animal va a fallecer se le
retiran estos cuidanderos o guardianes; el sujeto de muerte se queda sin
defensas y el
sujeto queda a merced del fracaso mortal. Así pienso que es la naturaleza,
que mientras a uno lo están protegiendo, va dando uno golpes donde quiera
o pueda, pero a uno lo descuidaron y ¡tenga ¡, ahí cayó … ."
LOS CURAS DEL
CINCUENTA
" …. A
mediados del siglo pasado nosotros en Matasuelta sabíamos de diferentes
personalidades de sacerdotes católicos, por ejemplo del padre Zenón quien
estaba ejerciendo en Sabanalarga en 1947 cuando yo estudiaba de primero a
tercero de primaria en El Secreto, en el colegio de los
gringos protestantes. El padre Zenón, gran persona, trataba amigablemente
a todo el mundo, hasta a los mismos protestantes los cuales eran
perseguidos en Colombia en esas décadas. Supimos que años después de 1953
este buen cura estuvo de párroco en Pajarito. En cambio sobre el cura
Gómez de San Luis de Gaceno, de este señor escuchábamos decir cosas
aterradoras como las que se escuchaban en todo el país de algunos curas
que entre 1948 y 1953 azuzaban al exterminio de vidas y bienes de los
liberales. Este cura desapareció de esta región después del armisticio de
1953. Pero hay más contrastes, como sucede en todo, como haber sabido que
durante esos mismos años difíciles de guerra fratricida, el padre
Goyeneche párroco de Úmbita salvó de una muerte violenta a una pareja
liberal con su pequeño hijo, protegiéndolos en su misma casa cural,
mientras aquella familia se desplazaba huyendo hacia Genezano (territorio de liberales). Las raíces
del Frente Nacional ya estaban echadas desde mucho antes por medio de
amistades y de matrimonios, pues había matrimonios de parejas mezcladas de
familias liberales y conservadoras. En el ambiente nuevo y todavía tenso
de finales de los años 50 e inicios de los 60, el padre Franco, nuevo
encargado de la parroquia de San Luis de Gaceno, empezó a conocer los
caminos con un baquiano o guía desde San Luis al Secreto, Aguaclara,
pasando por estas sabanas y esteros de Matasuelta hasta Santa Helena. Pero
él después ya bajaba solo a caballo o en mula, por esta ruta, podía ser 2
ó 3 veces cada año administrando los Sacramentos en fechas previamente
acordadas. Este cura, bajito de estatura, y sin miedo a los peligros
naturales del agua, ni a los animales peligrosos y los desvíos de caminos,
podía viajar tranquilo porque posiblemente no tenía mayores
antecedentes en el
fanatismo .Por otra parte, en Villanueva, Antioquia, según me enteré
leyendo un episodio de la novela “Lo que el cielo no perdona”,
dos sacerdotes recogían cadáveres de los liberales que flotaban por la
corriente de un río y les deban cristiana sepultura.”
( Hastas aquí esta
parte de las narraciones ) .
Entierro
de Campo Elías Forero Forero, padre del Narrador Campo Elías Junior
11
Diciembre de 1965, con la asistencia de la
comunidad de entonces.
Después
del velorio de Campo Elías Forero Forero frente a la casa de su hija Georgina,
ubicada frente al terreno destinado a la plaza principal hoy parque de los
Fundadores, actualmente corresponde a la carrera 13 # 8-30. Antes de salir
hacia el lote destinado como cementerio donde depositaran al segundo cadáver en
este cementerio.
La
misma comunidad de Villanueva, en el entierro cerca a la fosa. Es evidente la
ausencia de sacerdote.
Momento
de bajar el ataúd a la fosa, familiares de Campo Elías Forero Forero. De
izquierda a derecha en cuarto lugar Celinia
Romero de Forero, viuda.
Formato
de letra Única de cambio en 1954, 8 años antes de la Fundación de Villanueva
registrada en Barranca de Upía, se lee el nombre de Luis Antonio Forero R.
Lado
opuesto de la letra de préstamo donde se leen los nombres: Antonio Segura y
Pascual Daza
Villanueva
Ciudad Joven
En el sur de Casanare, la industria
ganadera criolla estaba sustentada por un asentamento rural (1950), de
aproximadamente 40 familias que acogieron generosamente a inmigrantes y
desplazados de Campohermoso, Garagoa, Almeida, Somondoco. En abril de 1963 se trazó la primera plaza, hoy Parque Fundadores, pero el asentamento
urbano se inició tres meses después de esta fundación.
Muy cerca del área donde se trazaron las primeras manzanas urbanas de Villanueva había una posada en un cruce de caminos ganaderos que conectaba a Casanare con Boyacá, Arauca, Meta y Cundinamarca. A partir de la década del 80, con la
apertura vial carreteable, se activó su potencial comercial y agroindustrial debido a su ubicación geográfica estratégica. El acelerado aumento
de su población rural y urbana, se debió a la demanda de mano de obra
agroindustrial, -años después petrolera-, que atrajo gentes de varias regiones del pais generándose un intenso mestizaje
etno-cultural. Los primeros 28 años de este pueblo progresista
transcurrieron bajo la tutela administrativa de Boyacá. Villanueva se ha constituido en una ciudad piloto para tomarle el pulso a
Colombia, por ser una ciudad cosmopolita a nivel nacional. Villanueva es un
laboratorio donde los científicos sociales encuentran la cultura colombiana
tejiéndose en una célula urbana y rural, por su reserva de valores sociales,
culturales y ambientales. Pero allí también se reflejan los fenómenos originados
en la problemática socioeconómica del país. Se perfila, por lo tanto,
como uno de los más promisorios talleres comunitarios, para construir el
equilibrio socio-económico de la Orinoquia.
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